Glenn Hernández, doctor intensivista: “La gente sabe que al intubar entra a un túnel cuyo destino es impredescible, y tiene mucho miedo”
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El médico intensivista y académico de la UC hizo un crudo relato de cómo se estaba viviendo esta segunda ola en los centros hospitalarios. El doctor explicó que a diferencia de la épica con que el personal se tomó la primera ola, “llegamos a esta segunda ola sin vacaciones, cansados, y con un 25% de licencias médicas. Ahora es pura tragedia, agobio”.
También dijo que “ahora más de la mitad de la gente que ingresamos es menor de 50 años. Estamos viendo a pacientes de 30 años”. Además, advirtió que recién estamos en el “purgatorio antes del infierno”, y que la situación podría empeorar.
E hizo crudo relato de la intubación: “La gente está lúcida, te piden el teléfono, y se despiden. He visto escenas desgarradoras. Y ahí los sedamos, los intubamos, y ven el último rostro. Y quizás es el último rostro que verán en sus vidas, porque pueden no despertar nunca”.